By Bill
Ya
es un nuevo día. Mis ojos aun no pueden pegarse; he esperado a papá pero no lo
han traído a un y comienzo a preocuparme. Después de lo que me dijo ayer,
supongo que todo ha cambiado, aun que… aun que fuera solo por unos días.
La
puerta se abrió con sigilo y ahí estaba la enfermera, sonriendo amablemente con
el desayuno en sus manos. Se acercó a mí y me pasó el desayuno; antes de poder
comer, ella se acercó a mí y tomó mi temperatura. Sonrió con satisfacción y
asintió.
-
¿cómo te sientes hoy?- no la mire. Negué, y negué porque realmente no me sentía
bien, me sentía…extraño… - ¿mal?- asentí.
-
¿puedo hacerte una pregunta?
-
sí, lo que quieras.
-
¿Por qué… por qué no ha vuelto mi papá? ¿Le paso algo malo?- ella negó.
-
no, él está bien.- sonreí. –pero estaba muy cansado después de todos los
tratamientos. Decidimos que era mejor dejar que durmiera por hoy ahí.
-
ah…- dije aliviado. -¿hoy volverá?
-
eso esperamos.
-
bien, gracias.
-
no hay de que.- salió por la puerta. Mi apetito se esfumaba por la ventana; hoy
no quería hacer nada más que salir de este lugar… no lo soportaría más.
La
puerta se abrió de nuevo, pero esta vez no le di importancia, esta vez solo
mire la ventana, añorando la vida que tuve y no quise aprovechar; comenzaba a
hundirme en mis propios sueños, pero sabía que esta vez, ni si quiera en el
sueño más realista podría salir de este lugar. Simplemente mi destino había
marcado una cruz roja en mi mapa, esa cruz donde supuestamente encontraría mi
tesoro, un tesoro que podría cambiar mi vida radicalmente, un tesoro, en donde
hubiera felicidad y monedas de oro y plata, con las que formaría mi choza y
volaría con una gran sonrisa que ni siquiera el pirata más malvado y cruel
podría quitarme.
Pero…
dentro de ese tesoro, solo se encontraba una venda, la cual usaría para cegarme
de mi realidad, para probar el veneno que yo mismo me cause y caer, no en una
choza de oro… caería en un ataúd de madera vieja. No encontraba la felicidad
dentro de ese cofre, encontraba la infinita muerte, en donde un alma en pena
tomaría mi mano y me guiaría hacia mi último y permanente destino. A ese
infierno, o quizá cielo, en donde volvería a la soledad, en donde me haría
esclavo de la tristeza y amigo del dolor. Vivir en el cielo no era distinto al
infierno; ahí habría almas tristes en cualquier rincón, solo algunas que se
encontraban y serían felices por la eternidad una vez más. Pero fuera de eso,
en ambos lugares había un altísimo, quien era propietario del lugar, uno, que
dejaba pasar a la gente buena, sincera y arrepentida de lo malo, y otro, que
daba la bienvenida a las personas que cometieron grandes y delicados errores
casi imperdonables.
Pero
para mí era lo mismo. Soledad. No tomaría la mano de un desconocido, no sabría
cual camino escoger, solo sabría el camino que mi ahora putrefacto corazón me
indicara… y ese no sería mi paraíso… ese sería el lugar más solitario. Mi
imagen sentado bajo la sombra de un árbol grande y vivo, sin nada a mí
alrededor, solo pasto… sentado mirando hacia enfrente, buscando compañía, buscando
alguien con quien interactuar. Pero ahí no hay nadie, ahí solo estoy yo,
guardando un espacio para mis queridos, esperando que algún día llegara su día
y estuvieran dispuestos a ser guiados de la mano por un órgano podrido gracias
a los años en soledad, un órgano que ya no palpitaba, solo brincaba con una
pequeña bandera roja, esperando obtener la atención de mi familia.
-
Billy, ¿no tienes hambre?- apartar mi mirada de la ventana se me hacía difícil,
pero la escuché, escuché su vocecita penetrar mis oídos. Cerré mis ojos y
después los abrí para mirarla.
-
no…
-
¿Qué tiene mi Billy?, ¿te sientes mal?- negué.
Pero
mentía, porque realmente me sentía enfermo. Aun que… ya no sabía si esa
enfermedad era física o mental.
-
ya no llores más, linda.- ladeó la cabeza. Levanté mi brazo con algo de
dificultad, pero lo logré. Tome su mejilla y la acaricié.
-
¿eh?- pronunció con confusión. –no estoy llorando, Bill.
-
ahora no.- aclaré mi voz. –pero has llorado antes de venir aquí.
-
no es verdad.
-
¿es todo?
-
Bill, no entiendo nada.
-
¿lo abandonas ahora?
-
¿abandonarlo?- asentí. –Bill…
-
yo no lo abandono…es decir…quizá…
-
no lo he abandonado.- interrumpió.
-
¿entonces por…por qué lloras?- bajo la mirada, sin responderme. Parpadeó un par
de veces, haciendo que las lágrimas se resbalaran por sus mejillas. – hey…no…
no llores, linda…
-
porque… te veo mal…te veo enfermo, Bill- limpió sus lagrimas. – lloro porque…
tengo miedo de perderte… te veo sufrir, te veo retorcerte del dolor y hasta
llorar….
-
no te pongas mal por verme así… no llores por algo que aun no pasa… me jode
esto, sí… pero lo lograremos… ¿y sabes por qué?
-
¿por qué?
-
porque estamos juntos, linda… Y nada nos podría derribar estando juntos.- ella
sonrió. – a veces… cuando quiero olvidarme de mis problemas… cierro los ojos e
imagino.
-
¿Qué imaginas?- pregunto, sonriendo.
-
que sería de mi vida sin problemas.- tomé su mano, la cual ella estrechó con
fuerza. -¿y sabes?
-
¿qué?
-
una vida sin problemas, no es vida.- comencé a toser. – si no habría tenido problemas,
no te hubiera conocido.
-
tu forma de ser me ha cambiado completamente. Antes de conocerte era tan
diferente.
-
antes de conocerte…no era feliz…es por eso que ahora… no le tengo miedo a la
muerte… si muero, moriré feliz…
-
no vas a morir Bill.
-
a lo que más le temo… es… a que me veas morir…
-
¿qué dices?
-
yo… no quiero morir frente a tus ojos…
-
no me iría de tu lado si llegara a pasar eso.- sonrió. –así que deja de temer a
eso.
-
ver tu mirada mientras yo pierdo la mía… me sería horrible…
-
voy a tomar tu mano siempre.
-
¿hasta qué… cof… cof… hasta que pierda el aliento?
-
hasta que no haya nada más que podamos hacer.
-
¿aunque una…enfermera me tenga que ayudar a darme un baño…?- reí.
-
aunque una enfermera te enjabone el cuerpo.- rió tiernamente.
-
me avergonzaría que me miraras desnudo… estoy hecho una mierda ahí abajo…-
sonreí.
-
bien, entonces no te miraré, ¿de acuerdo?
-
sí, te cubrirás los ojos…hasta que terminen de hacerlo…- acarició mi cabello y
dio un beso en mi pecho. Ahí estaba ese tumor, queriendo salir, a punto de
romper mi piel.
La
puerta se abrió por tercera vez; pero esta vez con la camilla de papá… mi
sonrisa se agrando al mirarlo ahí de nuevo. El doctor se acercó a mí y me miro
confundido.
-
qué, ¿no vas a comer?
-
no tengo hambre…
-
te pondré una inyección, Bill.- asentí. Él se acercó a mí con una jeringa que
clavó en mi pecho rápidamente. Comenzó a apretar para que el medicamento
entrara en mi pecho…pero… mierda…
-
¡¡¡cof…cof…cof!!!- tosí con fuerza y miré las sabanas con pequeñas gotitas de
sangre. -¡para cof... para ya…!- exclame con desgarro. - ¡ME DUELE, ME DUELE!-
era ese dolor inexplicable, ese dolor en el cual olvidas todo a tu alrededor,
ese dolor que te hace sollozar y gritar con fuerza. -¡PA COF… PARA YAAAAAA!
-
Bill, que ya no estoy haciéndote nada.- dijo el doctor con miedo, seguro sin
percatarse de mis labios enrojecidos. Pero aun seguía ahí, en mi pecho me dolía
algo… algo que me rompería el pecho.
-
¡COF… BASTA, POR FAVOR…. BASTA!
-
¡¿Billy, que te pasa?!
-
¡ME DUELE! ¡ME DUELE! ¡HAS QUE PARE! ¡POR FAVOR! ¡AHHH!
-
tranquilízate, recuéstate.- me empujó con delicadeza y tomó mi frente. - ¿Qué
sientes, en donde te duele?
-
¡aquííí!.-tomé mi pecho con fuerza.
-
respira, respira.- eso intentaba, pero mi vista comenzaba a hacerse borrosa y
el miedo comenzó.
By Tom
-
¿qué es lo que tiene mi hermano, doctor?
-
es que con tu hermano ya no se puede hacer nada.
-
¡yo puedo dar mi corazón!- grité. Él negó.
-
pero es que no es así de fácil.- suspiró. –el tumor comenzó a aferrarse a los
pulmones de tu hermano. Con suerte pudimos evitarlo antes pero, ese tumor no
pierde fuerzas, está luchando hasta ser externo, ya ha roto algunos tejidos de
su pecho.
-
mi hermanito no puede estar tan mal…si tan solo… tan solo hubiera un donante… ¡donde
mierda puedo conseguir a uno!
-
desgraciadamente, hay familias, las cuales tienen familiares en un coma
permanente, pero tienen esperanzas, esperanzas de que vuelva a vivir.
-
¡pueden seguir viviendo en el cuerpo de mi hermano!- grité.
-
entiende. Ellos, al igual que tu están devastados por sus familiares. ¡Ellos
tienen esperanza! No podemos quitarle la vida cuando ellos creen que volverá.
-
mi hermano está sufriendo… ¡mi hermano se está muriendo!... mi hermano es… es…
-
es una persona, al igual como lo es el familiar de aquellas personas.- apuntó a
una familia. –esas personas que tienen fe en que su hija vuelva a la vida.
-
pero… mi hermanito está sufriendo… ella no siente… ¡no tiene el dolor que mi
hermano tiene!
-
por favor, comprende que dejar a un familiar así no es tan fácil.
-
verlo sufrir… verlo llorar de dolor es más difícil… ¡VER COMO SE DETERIORA A
CADA SEGUNDO! ¡VER QUE YA NO PUEDE ABRAZARME COMO ANTES LO HACÍA! ¡VER QUE SU
SONRISA YA NO ES LA MISMA DE ANTES!
-
yo te entiendo, pero no puedo obligar a que donen el corazón de su hija, no es
lo correcto.- tomó mi hombro. –Tengo que irme, en unos minutos regresaré.- se
levantó y caminó lejos.
¡La
puta madre! ¡LA PUTA MADRE! ¿Por qué?... finalmente tenía razón, no podía
obligar a esas personas a que donaran el corazón de la persona que más querían,
pero… no… no podía aceptar que mi hermanito se fuera, que mi hermanito se
muriera…. De una forma tan horrible, porque él sufría, el lloraba.
[…]
El
mundo se me fue de las manos, mi alma escapó por la puerta y mis músculos se
aferraron unos a otros. Un día… un día y todo se acaba. Mi hermano, mi vida y
mi felicidad. Supongo que ese es el día en el que Bill se verá más enfermo y
cansado…no quiero verlo, no quiero hablarle ni tampoco quiero escuchar nada de
él. Mire a esa familia, que apenas llegaba de nuevo, para mirar a su hija,
seguramente.
No
podía creer que mi hermanito se me escapaba, que su débil alma decidiera irse
de esa forma tan dolorosa. No podía creer que no pude estar con él, que pude
dudar de él de alguna forma, que no creyera sus palabras y encima lo hiciera
sentir tan mal. él era tan bueno siempre, y ahora lo era más, ahora era la
persona fuerte que siempre supe que tenía guardada. Pero mi hermano ya no era el mismo, ahora era otra persona,
una persona enfermita y que moriría en menos de un día.
Esto
se ponía más extraño cada vez más. El doctor dijo que Bill nos quería hablar a
todos; abrazando a (tu nombre) fuertemente, caminamos al frente, mientras
Gordon, mamá, Anette y Arabelle caminaban tras de nosotros. Nos dejaron entrar
a la habitación, donde Bill estaba sentado, y papá, lo miraba serio, sin
entender quizá tampoco lo que sucedía.
-
quiero… quiero hablar con ustedes…- sonrió. De pronto bajo la mirada y comenzó
a jugar con sus delgados dedos. – Yo… prometí que no abandonaría esto tan
pronto…- (Tu nombre) bajó la mirada. – y no lo haría pero…me siento mal… me
duele mi cuerpo y mi pecho no me deja…en paz…
-
¿q-que quieres d-decir, Bill?- musité.
-
lo… pensé ayer…y… me di cuenta…de que…que…que…-comenzó a toser fuertemente,
tomo su pecho y se calmo de pronto. –ya no quiero sentirme así… lloro siempre…
no puedo calmar ese dolor…
-
Bill…
-
decidí…que…es mejor que… me extraigan…mi corazón…hoy…
-
¡¿Q-QUE¡?
-
es…es lo mejor, Tom…ya no quiero que me duela…tanto…ya no…
-
¡TODAVÍA ESTAS FUERTE, IDIOTA! ¡TODAVÍA PUEDE
HABER UN CORAZÓN!
-
no… no puedo, hermano… me duele…
-
¡NO TE DEJES CAER AHORA, NO AHORA! ¡ERES UN IDIOTA, ERES UN PUTO MARICA!- mis
lágrimas cayeron.
-
Tom… escúchame…
-
¡CALLATE, NO QUIERO ESCUCHARTE! ¡¿POR QUÉ NO PUEDES SER FUERTE?! ¡TU CORAZÓN SI
SIRVE, SI SIRVE!
-
Tom… salgamos de aquí…
-
Billy… por favor…no…- lloró (tu nombre).
-
linda…me siento enfermo…
-
no, Billy… por favor…no lo hagas…aun…aun hay esperanza, ¡tú me lo dijiste!
-
no sabía que me sentiría tan mal…
-
¡por favor, no! ¡Por favor!
-
linda…me duele mi pecho…siento que me falta el aire, no puedo aguantarlo…
-
¡BILLY, POR FAVOR! ¡SOLO ESPERA UN POCO MÁS!- ella comenzó a llorar.
-
lo siento…
-
¡ERES UN PUTO IDIOTA, BILL! ¡AUN ERES FUERTE, AUN TIENES FUERZAS! ¡¿POR QUÉ
MIERDA LO DEJAS TODO ASÍ!?- grite yo.
Salí
de esa habitación. ¡se daba por vencido! ¡BILL SE DABA PRO VENCIDO! Que mierda…
que puta mierda… SE QUIERE QUITAR LA VIDA…
Golpee
la pared y mire a esa familia, se encontraba platicando, sonriendo,
¡sonriendo!... mis ojos se llenaron de lágrimas de furia y dolor, mientras mi
hermano estaba muriendo ellos reían… mientras ellos tenían esperanza yo las
perdía, mientras ellos tenían una sonrisa en sus labios yo tenía lágrimas en
mis ojos… mientras ellos tenían a su hija… yo perdía a mi hermano…
Mi
mundo desapareció, mi corazón palpito fuertemente, como si hubieran arrancado
su mitad, como si dejara de funcionar, como si llorara junto conmigo. Volamos hacia
ese día… en donde jugábamos contentos a los piratas, en donde Bill añoraba ser
el pirata más fuerte, en donde él corría de mi con una sonrisa en sus labios, gritando
al ser amarrado por mi cuerda y apuñalado con mi espalda…en donde el perdía su
brazo y yo mi pierna en la lucha de un cocodrilo malvado…ese momento…en el que
éramos una misma persona, con la misma mirada y con la misma perspectiva del
mundo, en donde creíamos que el mundo no era nada más que un estúpido juego del
pirata bueno y el malo, del pirata fuerte y el débil…del pirata Bill y el
pirata Tom…en donde, para nosotros, el mundo no tenía problemas más que papá y
mamá…en donde para nosotros, la vida era un juego de dos pequeños piratas
aprendices y el cocodrilo que llegaba ebrio a casa para partir un trozo de
carne de la reina. Haciendo que los piratas dejaran caer sus espadas y se
fueran a su barco a llorar.
Ese
pirata ahora tenía veinte años, ese pirata ahora era más débil que antes, ese
pirata ahora tiraba su espada para siempre, ese pirata se convirtió en la
reina, a la que le arrancaban pedazos de carne, al que le arrancaron la
virginidad como si esta fuera un juguete y una diversión para él…ese pirata…se
había convertido en un hombre…en mi hermano…en Bill…
-
¡no! ¡NO, NO, NO!- grité. Corrí hacia ellos, que me miraron confundidos.
-
¿Qué pasa? ¿Podemos ayudarte en algo?-
-
yo… yo… ¡POR FAVOR!- me dejé caer de rodillas, haciendo lo que jamás creí que
haría yo mismo. -¡MI HERMANO SE VA A MORIR! ¡MI HERMANITO! ¡MORIRA….MORIRA!
¡NECESITA UN TRANSPLANTE DE CORAZÓN! Por favor…. Por favor ¡DONEN EL CORAZÓN DE
SU HIJA! ¡POR FAVOR! ¡POR FAVOR!- lloré tan fuerte. La mujer comenzó a llorar y
se puso de rodillas frente a mí.
-
es…es nuestra hija.
-
¡mi hermanito sufre…su tumor reventó! ¡Mi hermanito quiere darse por vencido!
¡MI HERMANITO YA QUIERE DEJAR DE SENTIR DOLOR! ¡Por favor!
-
tenemos esperanza…- dijo ella. –no podemos dejar que nuestra hija muera…
-
¡NO HAY TRASPLANTES! ¡NO HAY DONANTES Y NO ME DEJAN DONARLE MI CORAZÓN! ¡MI
HERMANITO NO QUIERE MORIR! ¡MI HERMANITO!.... ¡se acabará su vida… no podrá
comer la pizza que le prometimos ni…!
-
compréndenos, jovencito… nuestra hija puede vivir…
-
¡QUERÍA TENER SU MONO AZUL! ¡QUERÍA SUBIR A LOS JUEGOS!... ¡POR FAVOR…BILL NO
PUEDE MORIR! ¡MI HERMANITO NO… POR FAVOR!
-
no podemos… nuestra hija… nuestra hija puede despertar y… mirarnos de nuevo.-
sonrió mientras lágrimas caían de sus ojos. Tome sus manos y las aprese
fuertemente.
-
¡PUEDE VIVIR DENTRO DE BILL! ¡PUEDEN ESTAR LOS DOS JUNTOS! ¡NO DEJEN QUE MI
HERMANITO SE MUERA… NO DEJEN QUE BILL SE MUERA! ¡MI VIDA SE ACABA SIN EL! ¡ES
MI HERMANITO MENOR! ¡ES MI GEMELO!
-
me duele tanto…pero…no podemos, jovencito…es nuestra hija…
-
¡ÉL…ÉL ES MI VIDA…ÉL ES MI VIDA…! ¡NO QUIERO QUE SE MUERA! ¡NO QUIERO QUE ME
DEJE! ¡POR FAVOR, POR FAVOR, POR FAVOR! ¡SU CORAZÓN DEJARÁ DE PALPITAR…!
-
no podemos, jovencito…lo siento mucho… de verdad…- solté sus manos y me
arrastré hasta la pared, en donde me recargué y comencé a llorar fuertemente.
-
¡POR FAVOR, BILL! ¡NO SEAS IDIOTA! ¡ERES UN MARICA! ¡HIJO DE PUTA, TE ODIO,
BILL! ¡TE ODIO!....no me dejes…no me dejes…por favor…
TT_TT oye ya no quiero llorar, TT_TT cada ves los cpaitulos sno mas y mas triztes y con ellos lloro mas y mas, ame lo que hiso Tom, pero demonios odio llorar siempre TT_TT hay porfavor consigele undonante a Bill o que los padres de esa joven acepten y le donen el corazon a Bill y como que Bill se estaba dando por vensido TTT_TTT no esto es tan injusto!! siguela pronto cudiate AMO TU FIC!!!! SIGEULA PRONTO CUDIATE TKM BYE BYE :D
ResponderEliminarlloreeeeee T_T lloreeeee :/ que no se muera POR FAVOR el no puede morir asi :/ ..... estoy llorando no puede ser cuidate amo tu fic demaciado ojala que nunca acavara :$ siguela ya por favor!!!! cuidate :D
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