miércoles, 22 de febrero de 2012

capitulo 35


By Bill

Tom se ha quedado dormido a mi lado, parece cansado por la forma en que sus ojos están cerrados, parece no haber descansado. Deje que durmiera un rato más, seguro mamá tardaría en llegar para llevárselo. Tome una ducha; al salir Anette estaba en la recamara con Arabelle.

- Bill, ¿puedes cuidar a tu hermana?, tu papá y yo saldremos, no tardaremos, ¿puedes?- asentí y la tome en mis brazos. –Gracias, Bill.- sonrió y despeino mi cabello para después salir de ahí.

- ¡Bill, Bill, Bill!- golpeaba mi pecho.

- guarda silencio, ¿no ves que tu hermano duerme?- apunte hacia Tom; ella miro al tiro, claramente sin entenderme.

- ¡Bill!

- ¿sabes?, deberías aprender algo más que mi nombre, empieza a aburrirme.- sonreí. Ella tomó su vestido y lo levanto hasta su cara, comenzó a reír fuertemente. Le quite sus manos y volví a bajarlo. -¿Qué te pasa? No levantes tu ropa, niña, ¿no ves que hay dos hombres aquí dentro? Maleducada.

- …hum…- se escucho un quejido de Tom; Arabelle dejo salir un grito ahogado de sus labios, mientras me miraba con sorpresa.

- ¿Qué? Es tu hermano mayor- camine cerca de Tom, para que lo mirara. Arabelle tomo una rasta te Tom. –hey, suéltale su cabello, tonta.- comencé a reír, tomando su manita, pero ella no soltaba a Tom. –Arabelle, que le despertarás, ¡déjale!- susurraba.

- ¡BILL!- grito con agudeza, haciendo que Tom frunciera el ceño y entreabriera los ojos.

- te lo dije, lo has despertado.- sonreí. Tom tomo fuertemente la mano de Arabelle y la apretó, haciendo que abriera su mano y soltara su cabello. Tom se dio la vuelta, cubriendo su cara con las cobijas; Arabelle me miro y sus ojos se llenaron de lágrimas, comenzó a llorar fuertemente, tomando su mano lastimada.

- no, no llores, bebé…- tome su mano y la acaricie con mis dedos. –ya, ya no te duele, ¿verdad? Tranquila.- sus lagrimas dejaron de caer, las limpie con mis dedos y ella comenzó a sonreír. – ¿Quieres jugar?- quite mi collar y le daba vueltas. Arabelle lo miraba sonriendo, después de reírse a carcajadas.

- …hmm…Bill…calla a esa niña…- se sentó en la cama y nos miro.

- solo estamos jugando, Tom.

- bueno, pero no me deja dormir. Dile que se calle, a nadie le da gracia escucharle.

- es tu hermana, Tom.

- ¡no es!- se levanto de la cama y la tomo en sus brazos, mirándola serio. –Tú no eres mi hermana.- camino y la aventó en la cama. Arabelle lo miro con miedo, mas no lloro. –no deberías estar feliz con esa niña.

- ¿Por qué no?, es nuestra hermana, Tom ¡ella no tiene la culpa de nada!

- la tiene por haber nacido de una señora que no es mamá.

- pero su papá también es el tuyo.

- ¿y eso lo hace mejor?- asentí. -¿eres idiota?

- no, no soy. Tú si lo eres por decirle eso a un bebé, ¿crees que ella sabe lo que pasa?

- no, ella no sabe nada, es una inútil, solo sabe decir una maldita palabra y reírse como una estúpida.

- ¿Qué es lo que ocurre, Tom? Tú no eres así, ¿Por qué no aceptas de una que Arabelle es nuestra hermana? ¡Es hija de papá!

- eso no me importa, papá es un imbécil, dime lo contrario.

- no, no lo es, el te quiere Tom ¿Cómo crees que sentiría si te escucha decir eso?

- ¿acaso eso importa? A ti es al que menos le debería importar los sentimientos de ese idiota.

- ¿Qué es lo que tienes en contra de papá ahora?

- ¿no hay algo que quieres decirme, Bill?- se puso serio.

- no.

- ¿estás seguro?, se que me ocultas algo, se que lo has ocultado desde siempre. Papá no ha cambiado ¿cierto?, papá sigue siendo el mismo idiota que cuanto teníamos siete ¿verdad?- me puse un poco nervioso.

- no…papá ya cambió, tú mismo puedes comprobarlo…has estado con él y ya no es el de antes, de verdad cambio.

- algo bueno tenían que tener tus malditas drogas, ¡tú me lo dijiste, Bill!

- ¿Qué te dije, Tom?

- no intentes esconderlo una vez más, no intentes decir que no. ¡Papa te golpea, ¿verdad?!- sentí un pequeño infarto en mi corazón, Tom negó, al parecer mi mirara delató todo.

- …no…

- ¡¿no!? No entiendo cómo puedes cubrirlo así.

- el no me pega, Tom ¿Quién te lo ha dicho?

- ya te lo dije, ¡tú fuiste!, ¿Por qué lo cubres, Bill? ¿Por qué no me dices la verdad?

- ¡no me pega, Tom!

- me dijiste que lo hacía con cinturones…me dijiste que te decía cosas y… ¡fue él quien te dijo que Andy y tu eran novios, no Adam!

- ¡no es verdad, Adam también me lo dijo!- me quede en silencio, me había delatado por completo.

- ¿lo ves?, si te pega, Bill… ¿Por qué nunca denunciaste?

- Tom, el no me pega, por favor…- se escucho una bolsa moverse tras de nosotros, Arabelle llevaba a su boca la cocaína en polvo. - ¡Arabelle!- le tome las manos y quite la bolsa de sus manos, la tome en mis brazos y la lleve al baño, tome un poco de agua en mi planta de la mano y la eche en su boca. Ella la escupió con asco. -¡no debes comerte eso, ¿estás loca?! ¡Puedes morir con eso, niña, es droga!- ella me miro haciendo muecas, seguro por el sabor de la coca.

- que irónico, ¿no es cierto?- escuché la voz de Tom detrás de mí. Cruzaba sus brazos en su pecho y me miraba sonriendo con sarcasmo.

- ¿Qué?- pregunte, sin entender mucho de lo que me decía. El negó.

- esa bebé puede morir por las drogas, ¿y quién lo dice?, el único que las usa. Bravo, Bill…

- Tom…- había dado en mi punto débil, el único punto en el que me hacía recapacitar y saber que lo que hacía estaba mal.

- no, Bill…yo no puedo entender cómo es que tu sepas que lo que haces está mal, pero no quieres que los demás lo hagan. “no puedes cambiar a las personas si no te cambias a ti primero”.

- …yo…

- tendré que decirle a mamá lo que papá te hace.- eta ves no sabía que era peor: quitarme la vida antes de que papá llegara, o esperar a que el me la quite cuando llegue.

- no puedes, Tom…el de verdad no me hace nada…solo…solo me pego una vez…

- la misma vez que te dijo que eras un marica y salías con Adam, ¿no?

- ¡aun que papá lo hiciera, es mi problema, Tom, no te interpongas!

- ¡me interpongo si quiero, eres mi hermano!

- ¡y eso que!


- ¡no dejare que vivas así solo por tu miedo a denunciar!

- ¡no me da miedo!- mentí.

- ¿de verdad?- baje la mirada. –Es que tú me lo has dicho, hermano, me  has dicho que papá te daba miedo.- fueron lagrimas de decepción, o tal vez las fueron de alivio, pues tenía esto guardado desde hace tanto tiempo que no sabría cuando podría arreglarme psicológicamente de todo el daño que papá me ha hecho.

No encontraba palabra alguna para seguir defendiéndole, yo quería ser un buen hijo y guardarle el secreto a papá, pero ni la psicóloga había tocado en esta parte tan profunda de mí con Tom lo había hecho ahora.


Sentí mi moral caer hasta el fondo de mis pies, sentí mi cuerpo temblar y sabía que las lagrimas caían, mas no hacía ningún ruido al llorar. Arabelle me tomo el cabello y comenzó a sonreír, yo le tome su cabeza y la acerque a mi pecho, dándole un fuerte abrazo.

- ¿a ella también le pega, Bill?- al imaginarme aquello, pude sentir un gran nudo en mi garganta. Papá no estaría tan loco para pegarle a una pequeñita como ella.

- …no…dijo…dijo que con ella no iba a cometer los mismos errores que cometió conmigo…

- ¿Cómo es que has podido estar con el por tantos años? ¿De verdad lo quieres?

Mi voz ya no salía, ese nudo se quedo ahí, apretando cada vez más mis cuerdas vocales para prohibirme el habla. Me sentía desesperado, no sabía lo que hacer, no sabía cómo sentirme ni tampoco como reaccionar a esto.

Mis huesos comenzaron a crujir, y mi quijada comenzaba a bailar rápidamente. Tom solo me miraba, con esos ojos que, gracias a la luz del sol se podían mirar perfectamente. Abrace con fuerza a Arabelle, comenzaba a tener ansiedad, mi cuerpo necesitaba ser golpeado, ser rasguñado para calmarme. Mis lágrimas comenzaron a caer nuevamente, solo que estas lágrimas no eran necesidad de un abrazo o palabras de consuelo, eran la necesidad de calmar las ansias que consumían mi cuerpo.

- ¿Qué te pasa, Bill?- mire la cama aun revuelta, sentí mi cuerpo transpirar. Mi cuerpo era un imán hacia esa bolsa de plástico, lo necesitaba, de verdad necesitaba eso. Tom siguió mi mirada hasta la cama. –oh, no.- dijo enojado. Corrió hacia la cama rápidamente y tomo la bolsa.

- Tom…solo…las necesito… ¡las necesito!- Tom estrujo la bolsa, ese ruido que me rompía los tímpanos y me hacía gritar desesperado. –dámelas, Tom.- el negó, y movía sus labios como si se dijera algo a el mismo.

- no las vas a tener, eres un enfermo, Bill.

- ¡NO ESTOY ENFERMO!.... ¡las necesito, Tom…solo…enséñamelas…!- me miro confundido. –por favor…quiero mirarlas…quiero mirarlas…

- bueno…- tomo la bolsa y me las mostro. Sentí placer recorrer mi cuerpo, pero algo me dejaba intranquilo, necesitaba olerlas…necesitaba sentirlas dentro de mí.

- ¡DAMELAS, DAMELAS!- coloqué a Arabelle en la cama y me abalancé a Tom, haciéndolo caer al suelo. –por favor…Tom…las necesito, las necesito de verdad.

- ¡no, Bill!- saque la bolsa de sus manos y tome una jeringa. Me senté en la cama y sonreí para mí mismo, pues había salido triunfante. Levante la manga de mi playera y localice mis venas. Tom me miro sorprendido, tal vez nunca había visto una persona drogándose.

- ahh…si…- deje salir un largo suspiro de mi pecho, todo fue calma dentro de mí, fue felicidad y un poco de dolor. Tom me saco la jeringa del brazo, y la echo dentro de la bolsa; salió corriendo de la habitación. -¡Tom, Tom!- grite, pero el ya se había ido.

[…]

- ¡despierta, Bill!- di un pequeño salto. –por eso es que repruebas, Bill ¡estás en un examen y te duermes!- la maestra me miraba con desprecio.

- lo siento…- levante mi cabeza del escritorio la mire. Baje la mirada hacia mi examen, aun estaba completamente en blanco.

Adam me miro y negó, tomo su examen y se levanto de la silla caminando hacia la maestra.

- puedes salir, que tengas buen día, Adam.

-  igual, tú y gracias.- sonrió y salió por la puerta.

- ¡solo tienen cinco minutos para entregar la prueba, no más!- escribí mi nombre y comencé a leer. Nunca puse atención en Química…no sabía nada en absoluto.

- …mierda…- trate de responder lo que supiera, ¡tengo que acordarme de algo!

- bueno…- tomo mi hombro, me estremecí. –tu tiempo se acabo, eres el único aquí.

- no… ¡por favor, no! solo…solo cinco minutos más.

- hice lo que pude por estos últimos cinco, Bill. No puedo darte más, la escuela serrará y tengo que irme.

- por favor…yo me quedo aquí…

- no, Bill. Dame tu prueba.- tomo la esquina de la hoja y la jalo un poco, yo la jale un poco más y coloque el lápiz en ella.

- ¡no! por favor… ¡por favor!

- ¡dámela, Bill!

- ¡NO!- la arrugue y la tome fuertemente.

- trato de ayudarte y me respondes con estas actitudes. ¡Quédate la prueba si quieres!, ya reprobaste aun así, no has contestado nada y ni en cinco minutos vas a lograr contestar la mitad.

- …no puedo…no puedo reprobar…

- ya lo hiciste y tendremos que hablar mañana con el director.- se dio la vuelta y salió del cubículo. Comencé a llorar, decepcionado de mi mismo, nunca antes me había quedado dormido en una prueba, nunca antes me había comportado así.

Camine a casa, papá regaba el pasto y recordé a Scotty ¿Cómo estará ahora?

Me sentía con el pecho apretado, sentía dolor de cabeza y mi cuerpo sudaba terriblemente. Me sentía mal, con hambre y con desprecio.

Camine a la cocina y tome un vaso con agua. Subí a mi recamara y me acosté en mi cama con cuidado. Comencé a intentar dormir; los pensamientos inundaban mi cabeza. No podía perder el año escolar, no podía seguir decepcionando a papá de esta forma, odiaba este sentimiento, quería morir, morir para descansar de esta estúpida vida, estúpido papá, estúpida mamá, estúpidos doctores que me trajeron al mundo.

[…]

- ¿hola?

- buenos días, soy Arnold Heinze, ¿hablo con Bill, Bill Kaulitz?

- eh, si…soy yo ¿Qué necesita?- pregunte con desconfianza.

- he estado buscándote por semanas, ¿Cómo estás?

- bien… ¿Cómo estas tu?

- muy bien ahora que te encuentro.- sonreí.

- ¿Qué es lo que desea?

- quiero verte, ¿crees que sea posible?

- no. no lo conozco.

- seguro que lo has hecho, nos conocimos cuando eras un pequeño. Ibas en el kínder con tu gemelo, Tom, yo era su maestro.

- ¿de verdad?- sabía que no mentía, pues conocía a Tom.

- sí, entonces ¿Qué dices, puedo verte?

- bueno, si… ¿cuándo?

- hoy mismo.- rió del otro lado de la línea.

- ¿hoy?...está bien, ¿a qué hora?

- hum, me gustaría que nos viéramos en Kaffeeladen  a las 8:00.

- está bien…ahí estaré.

- gracias, Bill…si no te parece de mucha confianza esta llamada, puedes llevar a tu papá o mamá contigo.

- está bien, gracias.

- gracias a ti. Tengo que irme, ¡adiós y gracias!

- Adiós, gracias.- colgó.

By (tu nombre)

- ¡iremos a una fiesta, (tu nombre)!

- ¿una fiesta?

- así es, ¿Qué te parece?

- está bien.- tomamos una ducha y nos arreglamos. Sam parecía muy entusiasmado, quizá vería a Danny. Al salir, puse un vestido negro y unas zapatillas del mismo color.

- que linda estas.

- oh, gracias, tu también.- paso su mirada por si mimo y sonrió. –dime algo.

- lo que quieras.

- ¿veras a Danny hoy?- sonrió ampliamente.

- no lo sé, no creo que vaya pero, nos divertiremos.

- eso espero, no me gustan mucho las fiestas.

- bromeas ¿cierto? ¡Yo las adoro!

- de verdad, pero seguro que nos divertimos aun que sea un rato.- sonreí.

- te lo aseguro. ¿Te gusta bailar?- asentí. –bueno, con eso es suficiente.

Unos amigos de Sam pasaron por nosotros, eran todos tan amables, no se comparaban en nada con la fiesta a la que habíamos ido Bill y yo. Ellos eran amables y serviciales.

Al llegar ahí, la música no era muy fuerte, había un montón de personas. Sam me tomo de la mano y me guió dentro de la casa, me miro con una gran sonrisa.

- (tu nombre), creo que este es el momento en el que te confesare todo.

- ¿de qué hablas?

- bueno, primero, tomemos unos refrescos y salgamos al jardín.- asentí y eso hicimos. Nos sentamos en el pasto y él me miro.

- ¿Qué querías decirme?

- bueno…es que…si no te lo digo ahora puedo arrepentirme.

- tienes razón pero, aun no se dé que hablas.

- bueno… (Tu nombre)…


4 comentarios:

  1. bueno (tn)... danny es mi novio?... o... soy gay?... o... no sé... pero apuesto que algo asi le dira XD

    Tom! te felicito! al fin enfrentaste la verdad que Bill escondia!...
    Bill! cada vez vas para peor!.. vv' ya deja las malditas y miserables drogas! enfrenta los problemas y superalos de una vez! .. ok no XD ... todo a su tiempo...
    que querra ese señor con Bill?... no sera él quien los lleve al exito o si? .. espero que si :DDDDDDDD

    sube pronto! porfa no tardes!! amo el fic!

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  2. omg cristal me leistes la mente hehehehehe yo tambien pienso lo mismo q Sam es GAy jejejejejej!!!! me dejastes intrigada con la llamada q le hicieron a Bill.......!!!!! ya quiero q sigaaaaaaaaa!!!!!!!
    sube pronto

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  3. niñasss!! me leyeron la mente tambien jejej xD , pues que lindooo quiero saber mas :/, la cortaste en lo mas bueno sube mas pronto :D

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  4. WOW!!!!!! q bn q TOM ya enfrento a BILL, el sufre mucho y su unico refugio son las drogas pero por ese motivo no se da cuenta q esas maditas drogas lo destruyen =(

    mmmmm q le dira SAM a (tn)???? esta genial el cap sube pronto!!!!!

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