By (tu nombre)
- (tu nombre) ¡despierta!
- hum… ¿Qué pasa?- talle mis ojos.
- ya es tarde.
- ¡es fin de semana!
- no seas floja, levántate.- Sam se sentó en la
cama, y tomo mi cabello.
- ah, vamos…- me senté igualmente sobre la cama y
le mire.
- ¿ya has visto el día?- se levanto de la cama y
abrió las cortinas. -¡es precioso! ¿Y lo desperdiciaras recostada en la cama
hasta las seis de la tarde?- sonreí.
- eso es lo que las personas hacemos los fines de
semana.- me eche de nuevo en la cama.
- ¡por favor! ¡Quiero salir contigo!
- ¿A dónde?
- ¡al campo!
- ¿al campo?- asintió.
- ¿sí? Por favor, nunca lo has visto en un día como
estos, ¡por favor!- asentí y me levante de la cama. Me di una ducha y al salir
me coloque la ropa y seque mi cabello, el entro al baño y nuevamente me abrazo
por la cintura.
- qué bonito cabello.- sonreí. -¿puedo peinarlo?-
lo mire confundida.
- ¿peinarlo?
- si.- yo asentí y pase mi cepillo a él.
-¡gracias!- comenzó cepillándolo con delicadeza, sentí algunos jalones de
cabello y algunos suspiros de Sam Después tomo una goma para el cabello y lo
ato rápidamente. -¿te gusta?- me dio la vuelta para mirarme, nunca me habían
gustado mucho las trenzas, pero realmente Sam sabía cómo hacer que estas se
vieran preciosas.
- vaya, ¿Cómo lo hiciste?
- he tenido practica.- sonrió. –te ves linda.
- gracias.- sonreí.
- ¿nos vamos ya?- asentí y salimos de ahí. Bajamos
las escaleras y nos despedimos de su mamá. El día de verdad era precioso, hacía
mucho calor a pesar de que hace tan solo unos días había caído nieve.
Al llegar, tuve algo parecido a un deja vu, el pasto estaba grandísimo, apenas
podía ver mis rodillas en él, el sol brillaba y el cielo no mostraba alguna
nube cerca y los árboles se movían lentamente al ser golpeados por el viento.
- ¿te gusta?- me miro con esa linda sonrisa.
- estas bromeando, ¿cierto?, esto es precioso
- y tú querías estar todo el día en la cama.-
comenzó a reír.
- no es gracioso.
- sí, claro.- tomo mi mano, tratando de hacer que
su risa desapareciera. – (Tu nombre), necesito decirte algo.- se puso serio de
repente.
- claro, ¿Qué pasa?
- no sé cómo lo vayas a tomar.- comenzó a ponerme
de nervios su forma de hablar tan pausada y nerviosa.
- eh, ¿Qué pasa, Sam?- mordió sus labios
fuertemente y miro el cielo, comenzó a jugar con sus manos. -¿estás bien?- el
sonrió y después rasco sus sienes.
- si…
- entonces, ¿Qué es lo que ibas a decirme?
- ¿sabes?, tengo que pensarlo mejor, ¿entiendes? No
estoy muy seguro de cómo vallas a tomar esto…se que eres mi hermana pero, por
eso mismo espero que puedas entender que…que no puedo decírtelo ahora.- su piel
tan blanca comenzó a tomar un color rojo.
- tranquilo, claro que lo entiendo, solo no te
pongas así.
- lo siento es…es difícil ocultarlo y…créeme que no
quiero hacerlo, te prometo que te contare después.- sonrió y me dio un fuerte
abrazo.
- está bien.- sonreí contestando su abrazo. –Sam,
¿puedo hablar yo contigo?
- sí, dime lo que quieras.- sonrió e hizo que nos
sentáramos en el pasto.
- bueno... ¿recuerdas las opciones que me diste
ayer?
- ¿acerca de lo de Bill?- yo asentí y mordí mis
labios. Comenzaba a ponerme nerviosa y no sabía muy bien como decirlo. –sí, las
recuerdo ¿Qué pasa con ello?
- bueno, creo que he tomado una.- baje la mirada.
- ¿regresaras con él?- lo mire.
- ¿sabes?, las cosas que nos molestan en la vida
debemos quitarlas de nuestro camino, o si no, debemos tratar de arreglarlo; así
el verdadero camino será sin rencor o enojos.
- ahora no entiendo lo que quieres decir,
¿regresaras con Bill o te quedaras?
- quiero decir que…para poder estar bien necesito
deshacerme de Bill, o bien, arreglar las cosas con él. Y, quiero hacer las
dos.- ladeo la cabeza, seguro aun no lo entendía pero mi razón se comportaba
bastante torpe y me parecía difícil explicarlo.
- ¿entonces, que harás?
- quiero que todo entre Bill y yo esté bien, quiero
que seamos como éramos antes, pero debo aceptar que estar juntos, como pareja,
no es lo correcto.
- quiero que me des tres razones por las cuales no
es correcto.- me puse a pensarlas por un momento.
- bueno…Bill y yo estamos lejos, pienso hacer mi
vida aquí y...
- no las encuentras todas ¿y te digo porque?,
porque a pesar de que estén lejos y quieras realizar tu vida aquí, Bill sigue
presente, no fue hace mucho que terminaron.
- ¿Cómo es posible que hables así, Sam? Tenemos 16
años, somos chicos hasta para iniciar una relación.
- es posible, pero ¿has escuchado hablar de las
personas que inician su relación en la adolescencia y siguen juntos hasta los
40 años?- negué.
- no creo que exista tal cosa.- me crucé de brazos.
- pues estas muy equivocada, un ejemplo pueden ser
mis papás.- lo mire, sorprendida.
- ¡¿en serio?!- asintió, al parecer orgulloso.
–pero esas son muy pocas personas, en esas relaciones de verdad hay amor.
- (tu nombre), ¿Cómo sabes que tu y Bill no son una
de esas personas?
- porque ya no somos nada, ¿no lo entiendes? Yo de
verdad ya no quiero nada con Bill a menos que sea su amistad, y sé que es
difícil ser amigos después de novios pero…
- no, no es difícil.- interrumpió.
- Sam, ¿Por qué te empeñas en decir lo contrario a
lo que digo?
- porque, al contrario que tu, yo digo la verdad.-
sonrió.
- ¿Por qué dices que yo no la digo?
- porque sé que lo quieres a Bill, no digo que no
puedas hacer lo que de verdad desees, pero lo quieres, (tu nombre). Y si,
puedes olvidarle y tener nuevas relaciones, pero la primera o segunda relación
que tengas después de con Bill, lo harás para de alguna forma llenar el vacío
que sientes sin Bill, o bien, lo harás para olvidarle.
- quiero regresar.- me levante del pasto y camine para
volver.
- ¡(tu nombre)!- me alcanzo del vestido que
llevaba. –no quiero que te enojes.
- no lo hice.
- claro que lo hiciste, perdóname.
- de verdad no me enoje…me haces pensar las cosas
más…lo odio…
- es peor hacer las cosas sin pensarlo, puedes arrepentirte,
y el objetivo de las decisiones correctas es no arrepentirte de lo que haces.
- de verdad, pienso que no tengo la edad para
partirme el alma por un amor, o para pensar con quien voy a pasar el resto de
mi vida. Después de todo, esto tiene que seguir con o sin Bill.
- bueno, puede que tengas razón pero, sigo pensando
que, si tu quieres luchar por lo que quieres, deberías hacerlo.
- y lo hago, por eso me encuentro aquí ahora.
- bueno…hablemos un poco más sobre tus
sentimientos, Bill te quiere y seguro tu lo quieres a él. No entiendo porque no
siguen juntos.
- nunca debemos preguntarnos el “porque” de las
cosas.- el sonrió. -¿Por qué tu nunca me platicas sobre tu novia?
- no tengo.- sonrió.
- ¿y Danny?
- ah…bueno…- sonrió y los colores se subieron a su
rostro.
- se nota que la adoras.
- no tienes idea…hemos salido desde primero de
secundaria.
- ¿y no han tenido problemas?
- no, nos amamos…de verdad que si…pensamos en
casarnos
- no juegues, ¿de verdad?- asintió.
- pero no podemos, aun así, yo le quiero mucho.
- se nota por la forma en que tus ojos brillan al
decir su nombre.
- con los años he aprendido a amarle más.
- que tierno eres Sam, espero que algún día puedas
presentármela.- trago saliva fuertemente.
- ¿presentártela?
By Bill
Papá llego a casa y subió a mi recamara, se sentó a
los pies de la cama y me miro.
- ¿Cómo te sientes ahora?
- bien, gracias.- sonreí. Papá asintió. – papá…- me
miro. -, ¡Tom consiguió otra audición!- su cara se deformo un poco.
- ¿otra vez estas con esto? Te he dicho que no.
- por favor…esta vez Tom lo hará conmigo.- sonreí
ampliamente.
- no sé porque te obsesionas tanto con esto de
cantar.
- porque es lo que quiero para mi vida, papá.
- sabes que eres demasiado joven para poder
triunfar en esto, ¿sabes cuán difícil es tener una carrera así?
- sé que es difícil…pero es lo que quiero, papá, de
verdad es lo que más quiero.
- para eso necesitas preparación, ¿Cómo es tu voz?,
no debe ser de las mejores, ¿para qué hacer una vergüenza ahí?
- no haré una vergüenza…y si lo hago, al menos lo
intenté.
- no, Bill, no vas a poder ir.
- por favor, solo dame una oportunidad…déjame ir,
papá…por favor…- el negó. - no me quites mi sueño…no esto, por favor…
- no me gusta lo que quieres hacer con tu vida, ser
cantante no te ayuda en nada.
- yo voy a ser cantante…voy a cantar frente muchas
personas…- sonreí, nuevamente metiéndome en esos pensamientos.
- no te creo que logres hacer eso, tu no fuiste
destinado a la música.
- ¿Cómo lo sabes si nunca lo he intentado?
- porque tú no sabes hacerlo.- se levanto de la
cama y tomo a Arabelle de la cama, camino fuera de mi recamara; no quise
gritarle, después de todo el no lo había hecho conmigo. Me sentía triste por
eso, pues de verdad me gustaba hacerlo. La puerta se abrió y la imagen de Tom
aparco toda mi vista, el sonreía y en sus manos llevaba una guitarra acústica
color café y unas hojas blancas.
- Bill, ¿Cómo estas, hermanito?
- ¿Qué haces aquí?- me levante de la cama,
sintiendo un poco de dolor.
- ¿Qué que hago aquí? Vamos, Bill no me digas que
olvidaste la audición de mañana.
- claro que no la olvide pero…papá no me dejo
hacerla.- entreabrió la boca y su mano apretó fuertemente el cuello de su
guitarra.
- no me mientas. Bill…vas a hacerla.
- te digo que no me dejo, Tom.
- no me importa, la vas a hacer ¿me escuchaste?
¡Vas a hacerla!- sonreí al ver su cara tornarse un poco rojiza.
- sí, voy a hacerla…- dije sin dejar de sonreír.
Tom también lo hizo y se adentró a la recamara empujando la puerta con su pie
para que esta se cerrara. Tendió las hojas hacia mí, mordiendo sus labios.
-¿Qué es esto?- dije tomándolas.
- pensé que podríamos crear una canción los dos
juntos, ¿Qué te parece?
- ¿¡de verdad!? Vaya, me parece genial pero… ¿Cómo
lograremos hacer una canción en solo un día?
- bueno, yo tengo la música hecha, solo hacemos la
letra.- asentí.
- ¿puedes tocar la música?- Tom asintió y coloco su
guitarra en sus piernas, entre buscó en sus bolsillos y sacó una uña para poder
tocarla mejor. Comenzó con los primeros acordes, y solo con ello me pude dar
cuenta de que Tom tenía un gran talento con la guitarra; al mirarle tocar
parecía ser algo tan sencillo, más el sonido se miraba tan difícil de hacer.
Me llegaron un montón de ideas para la canción,
tome mi libreta y comencé a escribir todo lo que me llegaba al escuchar a mi
hermano tocar.
[…]
By Tom
- Bill, Bill… ¡despierta ya, Bill!- le sacudí
algunas veces, el se quejaba pero no abría sus ojos. -¡BILL!- esta vez los
abrió de golpe.
- ¿…Qué
pasa…?
- tenemos que irnos ya, ¡la audición empieza en una
hora!
- mierda…nos hemos quedado dormidos…- salió de la
cama y tomo alguna ropa de sus cajones, se adentró al baño y en pocos minutos
salió. -¿crees que papá se enoje?
- eso no importa, Bill ¿no quieres hacerla?
- claro que si quiero.
- entonces vámonos ya, antes de que papá nos
detenga.- asintió y salimos corriendo de la casa.
Cuando llegamos ahí, Bill ya se miraba un poco
nervioso, mordía sus labios y tomaba su cabello, enredándolo en sus dedos.
Pasaban las personas, algunas salían llorando, otras felices y al parecer eso
era lo que le ponía nervioso a mi hermano.
Era nuestro turno, podía ver temblar a Bill desde
donde yo estaba, le di un abrazo y él me regalo una sonrisa. Entramos ahí,
esperando hacer lo mejor. Los primeros acordes rompieron el silencio, solo resonaba
la guitarra y la voz de Bill, que cerraba los ojos al parecer aun nervioso.
[…]
- no estés así, hermanito.- le di un abrazo, pero
él no lo respondió. –vamos, Bill no llores, para mi cantaste precioso, no hagas
caso a lo que te dijeron.- limpió sus lagrimas y me miro.
- Tom…he perdido mi sueño…no podre alcanzarlo
¡nunca!...
- no lo has perdido, su opinión no es la única
importante. Tú sabías que había de dos opciones: “si” o “no”. Tenías que venir
preparado para cualquiera de esas dos respuestas, no te pongas así.
- ¿Cómo quieres que me ponga entonces?...papá si
tenía razón…
- ¡déjate de estupideces, Bill! tu cantas bien, si
ellos no supieron escucharte, es su problema, no el tuyo. No debes
abandonarlo todo ahora.
- ya no quiero cantar otra vez…
- bueno, esa ya es tu decisión, pero entiende que
aunque algún día llegues a ser un cantante, va a haber personas a las que no
les guste lo que hagas, y no vas a rendirte, Bill tú no eres un cobarde, no
eres una persona que se rinde.- Bill me miro mientras quitaba su maquillaje de
su cara.
- ¿lo dices en serio?- asentí.
- te molestaron mis amigos, ¿todavía te duele eso?-
asintió, dejando sus lagrimas caer. Esa no era realmente la respuesta que
quería, parecía haberle dolido en serio y me había quitado las palabras que
tenía para darle, así que me puse a pensar en que decirle.
- eres fuerte, hermanito ¿sabes a cuantas personas
les gusta verte triste?
- …a todas…
- solo a las envidiosas, a las que no les gusta
verte feliz porque sin duda eres más feliz que ellos; llevas una linda vida,
hermano. A mí no me gusta verte así.
- ¿en serio?- sus ojos se llenaron nuevamente de
lágrimas.
- de verdad. Yo te quiero mucho hermanito.- le di
un abrazo fuerte, que él, esta vez sí respondió. –oportunidades como estas hay
muchas, no llores solo porque no supieron aceptar tu talento.
- te quiero mucho, Tom ¡mucho!- volvió a abrazarme
con una sonrisa en sus labios.
- ¿Por qué no vamos a casa?- asintió.
- papá debe estar molesto.- dijo, sin quitar esa
sonrisa.
- nos regañará.- lo mire.
- si…y todo por tu culpa, tonto.
- ¡¿mi culpa?!
- si- dio un pequeño golpe en mi hombro. Yo negué sonriendo;
caminamos un poco sin hablar. Llegamos a casa, Bill y yo subimos a la recamara.
- entraré al baño, ¿sí?
- está bien.- sonreí y abrí la puerta de este y
entre. Cuando terminé, lave mis manos y acomode mis rastas frente al espejo. Después
salí del baño y un horrible olor penetró mis fosas, haciéndome toser
fuertemente. Bill se viro hacia mí para después acercarse. -¿Qué te pasa, Tom?-
tome mi garganta, pues encima la saliva se me fue por otro lado. Mire a Bill y
enojado le tome el brazo.
- ¿Qué me pasa a mi?- decía entre tosidos. -¡¿Qué te
pasa a ti?!- la respiración se hizo normal otra vez. Bill me miro confundido.
- ¿te enojaste?- pregunto nervioso.
- no puede ser como aun te atreves a preguntármelo.-
Bill bajo la mirada y después miro su mano.
- no me digas que es por el cigarro.
- esa cosa no es cigarro ¡eso es droga! ¡DROGA!
- ¿Qué hay de diferencia?- dijo, fumando esa
porquería.
- creí que ya no te gustaba esa cosa…
- me gusta, Tom no puedo dejarla.- saco el humo de
su boca.
- ¡espero que se te acaben esas porquerías y no
puedas comprar más!
- ¡seguro volveré a tener!
- seguro que no, ¡o quieres que te meta en un
centro de rehabilitación!
- ¡no puedes hacerlo, no eres mayor de edad!
- eso no importa y puedo decírselo a mamá.
- ¡no, no puedes!- después de eso nos quedamos en
silencio; Bill fumaba sin quitar la mirada de mi, sus pupilas se dilataban y se
hacían un poco rojas, dejaba salir suspiros. Después se fue a su cama. Yo le
mire y negué para mí mismo, algún tipo de coraje y rabia se junto en mi pecho,
tuve ganas de golpearlo hasta matarlo.
- ¡por eso (tu nombre) termino contigo, no fue solo
porque quiso estudiar en otra parte, es porque eres un drogadicto, un maldito
drogadicto!- Bill me miro con sorpresa, de sus labios solo salió un poco del
humo de esa cosa.
- no es cierto…
- ¡si lo es!- sabía que no debía gritarle, pero es
que Bill me ponía de mal humor al hacer esas cosas. Mire por todas partes de su
recamara, buscando las drogas que seguro tenía guardadas. -¡¿Dónde las tienes?!
¡¿Dónde diablos tienes esas drogas?!- lo mire enojado; Bill sonrió ampliamente,
volvió a fumar.
- no las encontrarás nunca.- me pudo causar un poco
de miedo su reacción, pues con el tiempo que llevaba fumando seguro ya estaba
drogado. Seguí buscando, entre sus cajones, bajo la cama y hasta bajo el
colchón, pero no encontraba nada. Me metí en el baño, buscando un lugar en donde
pudieran estar. Detrás de mí escuche una bolsa arrugarse, me vire al tiro: Bill
trataba de esconderlas bajo su playera.
- ¡dámelas!- corrí tras él y le aprisione los
brazos tras su espalda, haciendo que la bolsa cayera al suelo. Bill comenzó a
revolverse.
- ¡suéltame, suéltame ya!- el cigarrillo que tenía
pudo tocar mi ropa, hice que lo soltara y lo pise contra el suelo. -¿Por qué me
haces esto, tom? Creí que habías dicho que me querías…
- ¡por eso lo hago!- con un poco de brusquedad lo
azote en su cama, recogiendo esa bolsa y guardándomela en el pantalón. Bill
bajo de su cama y tomo los pedazos del cigarrillo de crack que había en el
suelo, comenzó a llorar fuertemente.
- ¡es lo único que tengo, Tom! ¡Es lo único que me
hace feliz!- sentí un nudo en la garganta, y si hubiera sido algún tipo de imbécil,
por pura lastima se las habría devuelto. No me gustaba ver a mi hermanito llorar.
- ¡estas cosas no pueden hacerte feliz, te están destruyendo!-
tomo los pedazos del cigarrillo y los metió en su boca.
- ¿por qué me quitas lo que me gusta, papá? ¿Por
qué?
- ¡no soy tu papá!
- por favor…dámelas devuelta…te prometo que cuido a
Tom…voy a hacer lo que me digas… ¡pero dámelas, papi! ¡Dámelas!
- ¡no te voy a dar nada, estas cosas van a acabar matándote!-
sus lagrimas caían rápidamente, y sus gritos eran desgarradores, como si le
quitaran una parte muy importante en su vida.
- ¡por favor, por favor, papá!...es lo único que
quiero…lo único que te pido que me dejes tener… ¡no me las quites! ¡No me las
quites!... ¡moriré sin ellas!
- te equivocas, vas a morir con ellas.- camine a la
puerta y le mire una vez más. El se arrastraba atrás de mí, tendiéndome la mano
mientras la abría y cerraba repetidas veces para que se las diera.
- ¡dámelas!... ¡por favor, papi!... ¡NO TE LAS
LLEVES!... ¡te lo ruego papi...Por favor no!
- ¡ya cállate, Bill! ¡Estas drogado, no sabes lo
que dices!- levante mis brazos, un poco frustrado por sus gritos. El se
estremeció, cerrando los ojos como un pequeño cachorro, uso sus brazos como un
escudo en su cara, mientras dio otro grito.
- ¡YA NO ME PEGUES, PAPI!...ya no me golpees…
- no iba a golpearte, Bill...
- no me pegues…no me pegues…quédatelas…pero no me
pegues ya…me vas a matar…
- ¿de qué mierda hablas? ¿Quién te pega?
- ¡tú me pegas, papi!...yo no quiero…- limpio sus
lagrimas. Yo me acuclille frente a él.
- ¿entonces porque no se lo dices a tu hermano?- le
seguí el juego.
- tú me lo dijiste…me dijiste que no le dije a Tom
ni a (tu nombre)…
- ¿(Tu nombre)?
- si…mi mamá…- comenzó a reír.
- ¿Por qué te golpeo? ¿Me puedes decir?
- no se…siempre me porto mal ¿verdad? ¿Por eso me
pegas?...
- ¿con que te pego, Bill?
- con tu zapato…con mis cinturones ¡y los tuyos
también!- reía fuertemente. –ahh…con una silla también…o con tus manos…
- ¿te grito, Bill?- Bill miro a la puerta, mientras
sonreía y saludaba. Me vire, no había nadie, seguro alucinaba; le tome las
manos.
- ¡NO ME PEGUES!- volvió a llorar.
- Bill ¡¿te grito!? Contéstame ¡¿te grito!?-
asintió- ¡¿Qué te grito?! ¿¡Qué te grito, Bill!?
- me gritas mucho…me dices marica y…no me acuerdo…una
vez me dijiste que porqué no era como Tom… o una vez que me muriera… ¿te
acuerdas cuando me dijiste que Andy y yo éramos novios?- rió – o…ah, ¿Cuándo dijiste
que ni mamá ni tú me querían?- reía tan fuerte, como si todo esto fuera un
grandioso chiste.
- ¿no te quiero?
- no…tu me amas…me llevaste al doctor, papi… por
eso no me importa mucho que me golpees…
- ¿Tu me quieres?- asintió, sonriendo.
- siempre…pero me das miedo cuando te enojas y me
ves feo…- le di un fuertísimo abrazo, deje caer mil lagrimas de mis ojos, Bill
reía, abrazándome a mí también. No puede ser esto verdad…tal vez solo lo dice
porque esta drogado, tal vez solo está inventando…tendría que hablar con el…a
mi hermanito no podía estarle pasando esto, no podía vivir de esta forma…
es cierto Tom!!!! es cierto!!! yo te lo confirmo!!! soy testiga del maltrato y abuso de Bill!! haz algo!! pronto!!
ResponderEliminarno es por las drogas! eso solo causa que diga sus secretos, que diga la verdad!! no lo dice por estar drogado! preguntale! interrogalo cuando este bien, has que te diga todo!!
en cuanto a (tn) .. VV' no debio abandonar a Bill... debio ayudarlo con su problema aunq no lo quisiera mas como pareja ...
jeje... sube pronto porfa!!!
me encanto cap!!!! que lastima que no lograron pasar la audicion!! y BIll sigue con las malditas drogas!!... parece q tom por fin se dará cuenta de todo lo que ha vivido Bill!! omg TN por q estan estan aassshhh necia por favor acepta q seguis amando a Bill por dios el te necesitaaaa... me encanto
ResponderEliminarsiguela!!!
ALien Love
Tom no es simplemente drogado , Bill dice la verdad y pss (tu nombre) que hacees??' nooo debes dejar a Bill por nada del mundo y SAm es rarito, no se peroo el es extraño xD hahaha me encanta tu fick porfa siguela
ResponderEliminarWOW!!! Tom has xaso de todo lo q Bill t dijo, xq TODO es verdad, solo q no dice nada xq su papa lo amenaza pero ya no quiere seguir con los golpes y ps (tn) debe ayudar a Bill xq talvez lo siga haciendo x tristeza de q ella ya no esta con el <3 <3 esta super tu fic sube pronto
ResponderEliminarDios ame mucho
ResponderEliminarel capitulo esta
ves te lusiste
Waw porfin todo esta
saliendo a la luz
*-* sigule
amo tu fic
:D